Termina el 2025 para un Sevilla FC que busca la estabilidad como propósito de año nuevo, es por eso que aquí en ElSevillista hemos querido echar una vista atrás al año del club.
Enero fue un mes agridulce para el Sevilla FC, marcado por la sensación de estar en plena reconstrucción deportiva bajo la dirección de García Pimienta. El año comenzó de la peor manera posible con una eliminación temprana en la Copa del Rey ante el Almería por un resultado abundante como fue ese 4-1, resultado que causó un golpe duro para un club históricamente copero y que generó frustración en la afición, pero a partir de ahí el equipo logró estabilizarse en LaLiga, compitiendo mejor que en meses anteriores aunque sin dar un salto definitivo. El Sevilla mostró una versión más sólida lejos del Sánchez-Pizjuán, sumando una victoria importante a domicilio ante el Girona por 1-2 con los tantos de Lukebakio y Saúl, mientras que en casa volvió a evidenciar sus dificultades para cerrar partidos y convertir buenas fases de juego en triunfos, empatando ante el Valencia CF y el RCD Espanyol por 1-1 ambos encuentros. En conjunto, enero dejó la imagen de un Sevilla irregular pero competitivo, que ya sin el lastre de la Copa centró todos sus esfuerzos en la liga, intentando construir una identidad clara y alejarse de la zona peligrosa de la tabla, aunque todavía con muchas cosas por ajustar.
Febrero volvió a ser un mes de contrastes para el Sevilla FC. El equipo alternó actuaciones muy convincentes con otras que evidenciaron que la estabilidad seguía lejos, especialmente en el Ramón Sánchez-Pizjuán.
El mes se abrió con un empate sin goles ante el Getafe, en un encuentro áspero y de escaso ritmo ofensivo que reflejó las limitaciones del Sevilla para imponer su juego en escenarios exigentes. El punto sumado permitió mantener cierta continuidad, pero también dejó la sensación de oportunidad perdida ante un rival directo.
El golpe más duro llegó una semana después, con la contundente derrota en casa frente al FC Barcelona (1-4). Pese al tanto de Vargas, el Sevilla fue claramente superado por un rival que explotó sus debilidades defensivas y se llevó los tres puntos con goles de Lewandowski, Fermín, Raphinha y Eric García. El resultado reavivó el malestar de la afición y volvió a poner en cuestión la fiabilidad del equipo en los grandes escenarios.
Sin embargo, cuando más dudas había, el Sevilla ofreció su mejor versión del mes lejos de Nervión. La goleada por 0-4 ante el Real Valladolid supuso una actuación muy completa, con un Juanlu decisivo gracias a un doblete, y los tantos de Isaac Romero y Dodi Lukebakio. Fue un triunfo que devolvió confianza y permitió respirar en la clasificación.
El mes se cerró con otro empate en casa, esta vez ante el Mallorca (1-1), en un partido que volvió a reflejar los problemas del Sevilla para gestionar ventajas. El gol inicial de Kike Salas no fue suficiente para asegurar los tres puntos, ya que Valjent igualó el encuentro y dejó, de nuevo, la sensación de que el Sánchez-Pizjuán no era el aliado esperado.
Febrero confirmó la tendencia de la pasada temporada: un Sevilla competitivo a domicilio, capaz de firmar actuaciones sólidas y efectivas, pero aún irregular en casa y sin la continuidad necesaria para consolidarse en la zona media de la tabla. Un mes que, como enero, dejó avances visibles, aunque también muchas incógnitas por resolver.
Arrancó el primero de marzo en Vallecas y lo terminó disputando el Gran Derbi en el Benito Villamarín. Posiblemente, un mes en el que las emociones de los sevillistas tuvieron altos y bajos. Altos porque el equipo, tras ganar el 9 de marzo en San Sebastián (0-1), terminó la jornada 27 a 1 punto de puestos de Europa League. Sin embargo, los bajos llegaron ya que acabó el tercer mes del año perdiendo de forma muy clara ante el eterno rival (2-1) y con una imagen nefasta. Ya venía de ser derrotado, antes del duelo ante el Betis, contra el Athletic de Bilbao en el Sánchez-Pizjuán (0-1). El final de marzo fue el principio del fin para García Pimienta, que continuaría encadenando derrotas antes de ser cesado.
El mes de abril se presentaba como una fecha clave para el Sevilla FC. Coincidiendo con la Semana Santa, el equipo buscaba el impulso necesario para sobrevivir a una temporada que estaba siendo sumamente complicada. Sin embargo, el balance deportivo resultó muy negativo, logrando sumar únicamente 1 punto de los 12 posibles tras enfrentarse al Atlético de Madrid, Valencia, Deportivo Alavés y Osasuna. Esta racha de tres derrotas y un solo empate fue el inicio de un final de temporada agónico para el Sevilla FC.
A nivel clasificatorio, la falta de resultados provocó un descenso notable. El Sevilla comenzó el mes en la 11º posición, situado en una zona aparentemente tranquila a nueve puntos del descenso. Tras encadenar los malos resultados de abril, el equipo cayó hasta la decimosexta plaza con 38 puntos. A pesar de esta dinámica negativa, la distancia con los puestos de peligro se mantuvo en seis puntos, ya que los equipos situados en la zona baja de la tabla no consiguieron sumar lo suficiente para recortar distancias.
La inestabilidad deportiva desembocó en cambios importantes en el banquillo. Tras perder en el Ramón Sánchez-Pizjuán ante el Atlético de Madrid y caer derrotados nuevamente en Mestalla ante el Valencia, el club tomó la decisión de cesar a García Pimienta el 13 de abril. Su lugar lo ocupó Joaquín Caparrós, quien asumió el mando para los últimos seis partidos de liga. En su debut, el técnico consiguió un empate ante un rival directo como el Deportivo Alavés, aunque no pudo obtener un resultado positivo en su primera salida frente a Osasuna en Pamplona.
En el plano individual, lo más destacado fue la figura de Nyland, quien fue nombrado Jugador Castore del mes de abril tras disputar todos los minutos y mostrar un gran nivel a pesar del contexto general del equipo. Por último, en el ámbito institucional, el mes cerró con una noticia positiva fuera de los terrenos de juego al alcanzarse un acuerdo de patrocinio entre el Sevilla FC y la Diputación de Sevilla.
MAYO, FINAES QUE MARCARON EL RUMBO
Tras un mes de abril en el que el Sevilla terminó en la 16.ª posición sin conocer la victoria y sumando solo un punto de los doce posibles, fruto de un empate a uno ante el Alavés, el mes de mayo se presentó igual de complicado para el conjunto dirigido por Joaquín Caparrós. El equipo afrontó cinco auténticas finales que acabarían decidiendo el futuro del club de cara a la temporada 2025-2026.
El Ramón Sánchez-Pizjuán acogió la primera prueba de fuego para el Sevilla FC, que se enfrentó al CD Leganés, decimosexto contra decimonoveno clasificado. El choque terminó con empate a dos, un resultado que benefició a ambos equipos. Haddadi y Javi Hernández firmaron los goles del cuadro pepinero, mientras que Kike Salas e Isaac Romero anotaron para el conjunto local.
Con este panorama, al Sevilla aún le quedaban cuatro compromisos durante el mes. El siguiente de ellos fue ante el Celta de Vigo,el conjunto blanquirrojo viajó hasta Balaídos para disputar un encuentro intenso que, de manera infortunada, terminó con derrota por 3-2. Tres días después, el Sevilla recibió a la UD Las Palmas, un equipo prácticamente descendido, en el Ramón Sánchez-Pizjuán. El triunfo permitió al conjunto hispalense sumar los tres puntos tras más de un mes sin conocer la victoria y escalar hasta la zona media de la tabla, aportando un mayor margen de tranquilidad de cara al exigente encuentro frente al Real Madrid.
Por lo tanto, en la penúltima jornada de Liga, el Sánchez-Pizjuán se vistió de gala para recibir al Real Madrid, inmerso en la lucha por el campeonato con el FC Barcelona. La victoria era vital para ambos conjuntos, pero el Sevilla cayó derrotado por 0-2 en los minutos finales. Jude Bellingham abrió el marcador en el minuto 75 y, ya en el 87, Kylian Mbappé sentenció el encuentro. Esta derrota dejó al equipo de Caparrós a solo un punto de los puestos de descenso, incrementando la tensión en Nervión y dejando al club pendiente de los resultados de rivales directos como el CD Leganés y el Girona.
La temporada concluyó con una derrota por 4-2 en su visita a Castellón ante el Villarreal, resultado que dejó al Sevilla en el puesto 17 con 41 puntos, apenas a uno de los puestos de descenso ocupados por Leganés, UD Las Palmas y Real Valladolid. La campaña 2025-2026 se convirtió en un punto de inflexión para el club, que necesitaba afrontar el mercado de fichajes de manera inteligente para revertir la delicada situación y sentar las bases de un proyecto más estable y competitivo.
Junio
El primer mes de mercado inició con el fichaje del entrenador argentino Matias Almeyda.
Quién llegaba con mucha mucha ilusión y con ganas de devolver al club donde se merece.
En ese mes el equipo sufrió muchos cambios con las finalizaciones de cesiones de Saúl y Lokonga.
Y las finalizaciones de contrato de Álvaro García Pascual y Suso quienes finalmente se unirían al Cádiz CF. En el mes se estuvo investigando mucho a jugadores como Alfon y Suazo que terminaron contrato con sus respectivos clubes. En junio también se oficializó la renovación de Álvaro Fernández hasta 2027. Y también el Bayer leverkusen se empezó a interesar por el central Francés Loic Badé
En julio comenzaba una pretemporada ilusionante con la incorporación de Matías Almeyda y la vuelta a los entrenamientos, marcada por la presión alta y los ejercicios físicos. El sevillismo respondió cerrando la campaña de renovaciones con 25.000 abonados.
En este mes, el Sevilla FC disputó tres partidos amistosos, de los que obtuvo una victoria, un empate y una derrota. La pretemporada arrancó con una derrota por tres goles a uno frente al Birmingham, con Nico Guillén como autor del tanto sevillista. El segundo encuentro estuvo marcado por la insistencia de los de Almeyda, que lograron empatar en el último minuto frente a un Sunderland casi preparado para el inicio de la competición.
El último enfrentamiento del mes de julio fue en honor a Antonio Puerta, con el desplazamiento a Alemania para disputar el partido contra el Schalke 04. El conjunto hispalense se impuso por dos goles a cuatro en un encuentro marcado por el recuerdo del eterno Antonio Puerta.
Tras la contundente victoria en tierras alemanas, el Sevilla FC volvió a los entrenamientos para seguir poniéndose a punto para el comienzo de liga.
El mes de agosto para el Sevilla FC fue muy activo, tanto en el terreno de juego como en los despachos. Los de Almeyda disputaron sus últimos partidos de pretemporada, y Antonio Cordón tuvo que planificar la nueva era.
Llegadas y salidas
Agosto fue un mes de mucho movimiento en los despachos. Antonio Cordón se empleó a fondo en la dirección deportiva para poder terminar la construcción del Sevilla FC 2025-2026. Finalmente, consiguió cerrar fichajes que a día de hoy, están siendo figuras clave, como el guardameta Vlachodimos, pero,por otro lado, salió del equipo un jugador clave, como es Loïc Badé, y que a día de hoy, el Sevilla no ha conseguido encontrar un jugador de garantías que lo sustituya.
Llegadas: Vlachodimos (Newcastle, cedido), Azpilicueta (libre), Suazo (libre).
Salidas: Badé (Bayer Leverkusen, traspasado), Idumbo (Mónaco, traspasado), Rafa Mir (Elche, cedido).
Últimos partidos de la pretemporada
El segundo día del mes, el Sevilla disputó un amistoso frente al Olympique de Marsella en el estadio Velodrome. El partido finalizó con un empate a 1, con gol de Sow.
Tan solo dos días después, se disputó en el Ramón Sánchez Pizjuan el tradicional Trofeo Antonio Puerta. El rival fue el Al-Qadsiah, equipo del fútbol árabe. El partido llegó a los penaltis tras un empate a 2 (Lukébakio e Idumbo), y finalmente acabó con victoria local.
Para finalizar la pretemporada, el Sevilla FC viajó de nuevo a Francia, para enfrentarse al Toulouse. Al igual que los otros dos partidos disputados en agosto, el encuentro acabó en empate (1-1) con gol de Lukébakio.
Con estos resultados, podemos llegar a la conclusión de que la pretemporada sevillista, durante el mes de agosto, no dejó las mejores sensaciones posibles, ya que no consiguió ninguna victoria durante los 90 minutos de juego.
Comienzo de liga
El día 17 de agosto daba comienzo el campeonato nacional de Liga para el Sevilla FC. Para inaugurar la competición, el Sevilla visitó San Mamés, para enfrentarse al Athletic Club. Al final del partido, el cuadro hispalense cayó por 3 goles a 2, con goles de Lukébakio y Agoumé, confirmándose así su primera derrota.
A la semana siguiente, el Sevilla recibía en la segunda jornada la visita del Getafe CF. El partido acabó 1-2, favorable a los madrileños, dejando unas sensaciones negativas en los aficionados presentes en el estadio en relación al juego del equipo.
Para cerrar el mes de agosto, los de Matías Almeyda disputaron su segundo partido a domicilio, esta vez visitando el estadio Municipal de Montilivi, la casa del Girona FC. En este encuentro, llegó la primera victoria sevillista. El partido terminó con un resultado de 0 goles a 2, con goles de Alfon e Isaac.
El Sevilla cerraba ponía fin al primer mes de liga con un balance de dos derrotas y una victoria, consiguiendo tres puntos de nueve posibles.
El mes de septiembre llegó cargado de noticias. Pues se confirmaron las salidas de Pedrosa, Lukébakio e Iheanacho y se cerraron las incorporaciones de Alexis, Cardoso y Mendy.
La primera cita del mes fue en el Ramón Sánchez Pizjuán, escenario en el que debutaron Azpilicueta, Mendy y Alexis. Los de Matías Almeyda lograron un punto "in extremis" en una jugada en la que tuvo que entrar el VAR. Una semana después, la expedición sevillista viajó a Vitoria para medirse al Alavés. El técnico argentino tenía clara su filosofía con línea de cinco hombres atrás, los que permitió un partido bastante controlado en líneas generales. Alexis dio la victoria al 67'. El último partido en casa del mes fue un quebradero de cabeza, el Villarreal comenzó por delante en el marcador. A pesar de que el Sevilla consiguió empatar y estaba cuajando un buen partido, Nianzou fue al suelo en minuto 77 lesionado y dejó al equipo con 10. Solomos dio la victoria al submarino amarillo en el 86. Por último, los de Nervión cerraron el mes en Vallecas ganando por la mínima con con un solitario gol de Akor Adams. 7 puntos de 12 en el noveno mes del año que dejaba al Sevilla décimo en la tabla.
Octubre
El mes de octubre fue para el Sevilla un mes con muchos altibajos donde venían de sacar los 3 puntos en un campo muy complicado como es Vallecas y en el primer partido del mes recibían al actual campeón de la competición liguera.
En un partido donde quedará en la historia con una aplastante victoria por 4-1 con los goles de Alexis,Isaac,Carmona y Akor Adams para finalizar la goleada.
Ese partido sin duda generó un ánimo en el equipo enorme de cara a enfrentar la temporada con otra mentalidad pero todo lo contrario.
Pero el significado del bajón del equipo hispalense fue la lesión del navarro César Azpilicueta que sin duda no deja de ser el líder de la defensa pero la edad no perdona y al jugar el 100% de los partidos el cuerpo no responde igual y causa lesiones musculares.
En el siguiente partido el Sevilla recibía al colista de Laliga El RCD Mallorca que aunque el club hispalense se adelantó con un gol de Vargas el partido acabaría 1-3 a favor de los mallorquinos un partido que sin duda dejaba muchas dudas en el equipo.
A la semana siguiente el Sevilla visitó San Sebastián en un partido cargado de errores donde cayó derrotado por 2-1 con doblete de Oyarzabal de un penalti causado por Cardoso y un error en saque de banda del lateral sevillano Carmona.
El Sevilla afrontaba entre semana la copa del Rey trasladándose hasta Toledo para jugar la primera ronda copera donde ganó 1-4 con doblete de Januzaj gol de peque y de kike Salas.
Y para finalizar el mes el Sevilla visitó el Metropolitano en un partido donde los blanquirrojos parecía que tenían el partido controlado hasta un penalti clarísimo de Nianzou a Giménez en el 60' que culminó Julián donde encaminó la goleada colchonera con los goles de Griezmann y Almada.
Fue un mes extraño a nivel de ideas de equipo con muchos altibajos donde evidentemente lo mejor fue la abultada victoria al FC Barcelona que se quedará en la historia hispalense.
Con el cierre del año en el horizonte, el Sevilla FC llegaba a un mes de noviembre de forma irregular con su primer partido en el Riyadh Air Metropolitano ante todo un Atlético de Madrid. El encuentro saldó de la peor manera posible con una derrota que mermaba la moral del equipo tras caer 3-0. Sí es cierto que realmente el juego mostrado sobre el césped no era malo, con un planteamiento diferente al visto a principios de temporada con una línea de cuatro defensas que no terminaba de encajar. El partido ante CA Osasuna llegó y los nuestros no decepcionaron ganando de manera corta pero eficiente 1-0 en Nervión. Cuando parecía que volvíamos a recuperar el nivel visto en partidos anteriores, las lesiones incrementaron, dejando al plantel más corto aún. Los últimos partidos fueron un desastre total, primero ante el RCD Espanyol, un encuentro en el que los pupilos de Almeyda se vieron superados y cayeron 2-1, una ocasión en la que no se pudo rescatar nada positivo, ya que Vargas y Januzaj salieron lesionados y la falta de gol volvió a ser clave en una nueva derrota. Para terminar el mes, el Gran Derbi invadió la ciudad de Sevilla, dividiendo la misma en dos partes: la rojiblanco y la verdiblanca. Un partido en el que la tensión se palpaba en el ambiente, con un Sevilla falto de confianza y actitud ante un Real Betis que salió a comerse el Pizjuan, y así fue... Los de Manuel Pellegrini vencieron 0-2, cortando la sequía en Nervión y arrebatando su primer derbi a Matías Almeyda.
Con el último mes del año en el horizonte, el Sevilla FC se enfrentaba a diciembre con la necesidad de cerrar 2025 dejando una mejor impresión que resultados. El primer desafío llegó en la Copa del Rey contra el Extremadura, un partido complicado en el que los de Nervión supieron sufrir para avanzar de ronda con una victoria de 1-2, mostrando eficacia en los momentos clave, a pesar de no dominar el juego de manera clara.
El regreso a LaLiga supuso un jarro de agua fría con la visita a Mestalla. Frente al Valencia, el Sevilla firmó un empate 1-1 en el último minuto, en un partido de los nervionenses que, pese al mal juego, parecía ganado. Sin embargo, la reacción llegó en el Sánchez-Pizjuán contra el Real Oviedo. En el partido más completo del mes, los sevillistas se mostraron contundentes y lograron un sólido 4-0 que devolvió la confianza tanto a la plantilla como a la afición.
Cuando parecía que el equipo empezaba a encontrar cierta estabilidad, la Copa volvió a interponerse en su camino. Esta vez, el Alavés detuvo al Sevilla con una derrota por 1-0, lo que resultó en una eliminación prematura que supuso un duro golpe anímico y volvió a sembrar dudas sobre el proyecto. Para cerrar el mes, el conjunto hispalense visitó el Santiago Bernabéu, donde cayó 2-0 ante el Real Madrid en un encuentro que quizás el Sevilla mereció más, compitiendo bien y fallando ocasiones para haberse marchado de la capital con, al menos, la mínima recompensa.
Así, diciembre dejó un balance irregular: luces y sombras, alguna victoria convincente, pero también tropiezos que reflejan que el Sevilla aún no ha encontrado la continuidad necesaria para asentarse y mirar con optimismo hacia el nuevo año.
